jueves, 24 de enero de 2008

Malita

Me arrastro cual caracol dejando una estela de tosidos y calores de fiebre.
Hace tanto tiempo que no me encuantro mal que se me había olvidado lo coñazo que es; haciendo memoria la última vez que estuve en un hospital fue en mi operación de apendicitis (qué horror!), pero teniendo en cuenta que de eso han pasado más de diez años no lo cuento, por lo que mi último malestar febril data del primer año de carrera, allá por el 2000, estaba tan mal que hasta deliraba con el libro que estaba leyendo.
Sin embargo, no creo encontrarme tan mal, creo que mañana estaré mejor, más me vale porque a las seis de la mañana sonará el despertador recordándome que se acabaron las vacaciones forzadas.
He estado pensando que seguro que si hubiera currado esta semana pasada estaría como una rosa, pero siempre pasa que cuando tienes tiempo para hacer lo que te de la gana hay un virus al acecho que te jode las vacaciones, en fin...
Mi madre me llama a cada hora y mi padre cada minuto, y mi hermano lo lleva con el amor fraternal de "¡coño! no se va a morir, dejadla en paz" (tengo ganas de que venga, será estupendo tenerlo cerca).

5 comentarios:

Anónimo dijo...

a mejorarse, que no queremos que nos contagies a pelusa, je je je je.
El padrino de balck ball

AlBeRt dijo...

¡Que te mejores guapa! Lo del virus al acecho es un clásico, i lo de los padres llamando cada dos por tres, o sea, cada séis, tambien es típico.
Besos desde Pallejà.
Semehaestropeadolabarraespaciadora

Contos do furafollas dijo...

Hombre, pos tu hermano será el racional, pero mi hermana es peor que mis padres, será cosa de ser mujer??? XD Mejórate pronto!! BsS

Anónimo dijo...

Pues ánimo, que parece que la cosa, cof cof, es generalizada, cof cof cof

Anónimo dijo...

¿Qué ha hecho de ti la enfermedad? ¿Por dónde andan tus pasos?. Hace tiempo que no se te ve por estos lares. Espero que estés bien.
Bicos