martes, 19 de febrero de 2008

Chapó Jackson!

Siento orgullo, orgullo y satisfacción, por todos los que me rodeáis, por acompañarme en mi soledad, por cuidarme en la distancia, por quererme a pesar de las barreras,... hoy en compañía de mi gente aprecio más el valor de su cariño, su presencia revitalizadora; sin embargo, echo de menos a los que están lejos, y sobre todo a la Big Band.
Nunca os he contado (al resto) quiénes son la Big Band: ellos son yo, y yo soy ellos, nada sería igual sin ellos, son mis amigos, mi gente, mi luz, mi apoyo cuando no me sostengo, mi sonrisa cuando pienso en ellos, mi orgullo, mi tristeza cuando ellos están lejos de mis ideas, aprecio sus opiniones, vivo por ellas y no doy paso sin ellas, sin consultar, sin aprobación, sin ese aquelarre mutuo.
Antes era Zeta, ella es especial, ella lo sabe, ella es "amistad", todo el significado de esa palabra lo es ella, porque ella vendería su alma al diablo por mi, y yo por ella; no sé si alguna vez habéis sentido que si os tiráis a un barranco, al vacío, si lo hacéis incluso con los ojos cerrados, ella estará ahí abajo con los brazos extendidos esperando para recogerte, sea como sea que hayas llegado, si te has caído ella te levantará, si te has hecho un rasguño ella te curará, si lloras ella te secará las lágrimas, porque ella, no sé cómo, ni por qué lo hace: está siempre ahí.
Ahora, ha encontrado su otro yo, la parte que tanto tiempo estuvo buscando, el elemento necesario para hacer locuras por y para el amor, el que la hizo crecer como persona. Él es Tito, nuestro Tito, Tito Spaghetti, nuestro actor, que de tanto actuar se ha creado el mejor papel de su vida, que es el de ser una de las mejores personas que conozco, capaz de hacer feliz a un ser que quería serlo, y, a su vez, de hacernos felices a los que le rodeamos; él es la esencia, la felicidad, la generosidad hecha persona, por él muchos harían locuras, y ni siquiera él mismo se da cuenta de todo lo que vale,... y lucha, lucha cada día por ser y hacer feliz, porque cada día sea diferente, por hacer que su espontaneidad sea contagiosa, para que nazca una sonrisa cuando menos te lo esperes,...
Y juntos han creado una familia: Nico, Frida, Alfalfa, Chufa y Trueno,... han sabido hacer de sus días momentos inolvidables, y se (y lo se con tanta fuerza que el alma se me escapa del cuerpo), se que llegará ese momento que tanto deseáis, porque dicen que cuando deseas algo con tanta fuerza, todo el Universo conspira para que se haga realidad.
Por vosotros y para vosotros, para que queden muchos años por delante para compartir, para sentir, para vivir,... hoy brindo con mis lágrimas por vosotros en la distancia.

viernes, 15 de febrero de 2008

En soledad

A veces digo tu nombre en voz alta
y es como si gritara.
A veces digo tu nombre en voz baja
y es como una oración.
A veces digo tu nombre hablando
y es como si despertara.
A veces digo tu nombre en sueños
y se convierte en canción.

A veces, a veces, tantas veces,
eres como una melodía a flor de piel.
A veces, a veces, tantas veces,
tu dulce nombre me sabe a miel.

A veces veo tu rostro en el cine
y es como si me llamara.
A veces veo tu imagen por la calle
y es una burla del destino.
A veces veo tus ojos en una puesta de sol
y es como si flotara.
A veces veo tu cuerpo hecho música
y sé que eres mi sino.

A veces, a veces, tantas veces,
eres como un deseo hecho realidad.
A veces, a veces, tantas veces,
en tu frontera se pierde mi edad.

A veces siento tus labios en los míos
y sé lo que es tocar la gloria.
A veces siento tus manos en mi mente
y es como si fuera inmortal.
A veces siento tu alma en mi ser
y se me desvanece la memoria.
A veces siento tu amor junto a mi
y todo se hace real.

A veces, a veces, tantas veces,
eres como una quimera de bondad.
A veces, a veces, tantas veces,
te digo que te quiero en soledad.

En soledad

miércoles, 13 de febrero de 2008

Indignación

Hoy mi indignación ha hecho mella en mi, y ya no puedo más... no sé como calificarlo: abuso de poder, más cara que espalda,...
Estoy cansada de levantarme a las seis de la mañana, cruzar media Barcelona para llegar al trabajo a las ocho en punto, partirme la espalda currando en un trabajo que me empieza a encender la luz verde de "puede ser", días y días sin ejercer mi derecho a descansar veinte minutos, a tomar un mísero café y desconectar, no, me lo cojo para llevar y sigo currando, tratando de poner orden en un caos de papeles, en una confusión de contratos, aperturas y cancelaciones que mi compañera de trabajo ha tenido la delicadeza de dejarme "un poco" desordenado.
Y llego, y curro, y me encuentro papeles y más papeles,... y me gusta, me gusta sentirme útil y ayudar en lo que pueda, y aprender, hacer cosas nuevas, y soy la primera que dice que prefiere estar currando que no hacer nada en toda la mañana; pero una cosa es esto, y otra muy distinta es que alguien llegue tarde a currar, que se pase media mañana almorzando, que aproveche cualquier cliente para ir a tomar un café "rápido", que aparezcan papeles en mi mesa y me gire y vea su pantalla en blanco, que no haga nada, que no sea capaz de tener la iniciativa de hacer unas putas fotocopias si no tiene nada que hacer, que sea el primero en irse y que endiñe a los demás trabajos que son suyos, que cobra para hacerlos y que le de igual que los demás estén ahogados, y que venga sonrriendo y diga "no me des problemas, soluciónamelos", y que después, aún encima, tenga que agradecerle que de un buen informe de mi, un buen informe que merezco, un informe que depende de alguien al que YO le tengo que gestionar SU cartera de clientes, que le de palo llamar a los clientes y "hazlo tú Yria, mira que te doy un 30% de los beneficios, jaja!", "como va mi cartera Yria?", "mira que lo más importante son las gestiones", y que cada vez que se pasea por la oficina y ve que estoy tratando de poner orden con los armarios abiertos me diga "Yria no me gusta que los armarios estén abiertos", a lo que yo respondo "estoy ordenando los expedientes", y responde "es que da mala imagen", a lo que me encantaría responder "pues ordénalos tú!, carga con ellos hasta el puto armario, ábrelo haciendo malabarismos, y cuando acabes dame soluciones, no problemas!!!".
Lo siento, no me suelo quejar, pero hoy mi grito y mi desahogo lo hago con vosotros. Porque sé que mañana volveré a escuchar esa frase y tendré que girarme para no mirarle con el asco que le estoy cogiendo. Menos mal que Eva es la antítesis, la balsa a la que trato de sujetarme, aunque ella esté más quemada que yo.
Gracias por escucharme chicos, pero tranquilos sabéis que en mi cara siempre hay una sonrisa para vosotros.
Creo que ya voy necesitando los mimos de mi madre, pero el lunes vendrá en mi ayuda a mimarme como sólo ella sabe hacerlo y mi padre a abrazarme provocando ese sentimiento de protección que sólo sabe darme él.

lunes, 11 de febrero de 2008

Mi pelusita


Para que no os olvidéis de mi pelusita.

De vuelta

Lunes... los lunes no me gustan, creo haberlo dicho antes, pero lo vuelvo a repetir: los lunes no me gustan, aunque si no existiese un lunes un martes ocuparía su lugar.
He vuelto, después de una enfermedad que me ha tenido sumida en la oscura profundidad del malestar, después de sobrevivir a una mudanza que incluía limpieza del nuevo piso, traslado de las inútiles pertenencias que poseo, días y días de comprar para llenar un piso que a primera vista lo tenía "todo"; he vuelto después de ejercer de anfitriona durante una semana de una pareja extraordinaria que se merecían mi antención al 100%, y he vuelto después de cambiarme de oficina a la oficina de Satanás, con papeleo inmundo de, incluso, años pasados que parecía tener vida propia y llegar a mi mesa sin poder hacer nada al respecto, después de currar lo que pensé que nunca curraría, sin descanso, sin parar, sin levantar la cabeza, sin mi hora de café,... recompensada por la visita del director comercial para pedirme mi currículum después de que mi subdirectora me viera aparecer día tras día por la puerta con los ojos puestos en mi mesa llena de papeles pendientes y jornadas faltas de horas para todo.
He estado muy cansada, muy, muy cansada; hoy he dormido una pequeña siesta después de más de veinte días sin probar mi nuevo sofá (que, todo sea dicho de paso, es fantástico), aunque me espera un cesto de ropa por planchar y unas cuantas cosas más por hacer, pero estoy contenta porque ya está, ya no más mudanzas hasta, como mínimo, un año; además, el lunes llegan mis padres y mi hermano y será fantástico verlos, tenerlos cerca, será una semana al 100%, pero llena de momentos para recordar.
A todos vosotros gracias, por la preocupación demostrada durante estos días, y mil perdones por el vacío generado en mi ausencia. Javi, gracias a ti también (tengo que verme tu blog de arriba a abajo para ponerme al día). Os he echado de menos, mucho, aunque mi cuerpo hubiese pedido "papas".
Mil besos